jueves, 20 de junio de 2019

TP4 - El Mes De Preaviso

Sexto Corte


GUION:
El año pasado laburé en una oficina pagaban poco, Pero era mi primer trabajo, siempre llegaba re temprano y pensaba que podia ir creciendo con el tiempo. Tenía la sensación de haber comenzado una nueva etapa: tenía mi sueldo, mis horarios, mis tareas: nunca me había sentido tan adulto.

Un día, en la entrada, un compañero quiso fichar, pero no pudo... Lo habían despedido sin decirle nada, se fue llorando me acuerdo... tranquilamente me podria haber pasado a mi, Pero ese fue solo el primer despido de una cadena de recortes masivos, una mañana llendo al laburo pensaba en cómo sería que... me despidieran, Perder a mis compañeros, mis hábitos, mi único ingreso: la ilusión de crecer en mi carrera.

Cuando llegué a la entrada, quise fichar pero no pude ... fue como un baldazo de agua fria, me queria morir, y ahi me di cuenta que ya no era un pendejo, ahora era un desempleado más.



Quinto Corte



GUION:
El año pasado laburé en una oficina pagaban poco, Pero era mi primer trabajo, siempre llegaba re temprano y pensaba que podia ir creciendo con el tiempo. Tenía la sensación de haber comenzado una nueva etapa: tenía mi sueldo, mis horarios, mis tareas: nunca me había sentido tan adulto.

Un día, en la entrada, un compañero quiso fichar, pero no pudo... Lo habían despedido sin decirle nada, se fue llorando me acuerdo... tranquilamente me podria haber pasado a mi, Pero ese fue solo el primer despido de una cadena de recortes masivos, una mañana llendo al laburo pensaba en cómo sería que... me despidieran, Perder a mis compañeros, mis hábitos, mi único ingreso: la ilusión de crecer en mi carrera.


Cuando llegué a la entrada, quise fichar pero no pude.


Cuarto Corte








GUION:
Hacía frío, pero no era un día fresco en particular, llegue corriendo a tomarme el bondi que me
deja justo en la puerta


Ni bien pasé la puerta el de seguridad me dijo que pase directo a recursos humanos, pensé
¿Posta estos ratas me van a dar un aumento? pero cuando entré, la cara del chabon me decía
todo… cagué fuego 


Lo primero que pensé, fue que iba a extrañar a mis compañeros, pensaba en los buenos
momentos, los apodos, las anécdotas, los chistes y las cargadas


cuando entre en la oficina dije por lo bajo “me despidieron”, levantaron las cejas un momento y
volvieron al trabajo, perplejos pero acostumbrados, así vivíamos. 


me hicieron trabajar durante un mes, un mes de preaviso, el mes más extraño de toda mi vida,
todo era irreal, el dueño no me saludaba, miraba para otro lado, mi jefe siempre que me acercaba
se levantaba y apurando el paso hacia ningún lugar me decía que estaba ocupado.


A mis compañeros les daba miedo pedirme cosas, me las pedían por lo bajo o ni siquiera me
las pedían, me hablaban como si estuviese condenado.


Y si, de algún modo estaba condenado, toda la empresa se había convertido en un largo pasillo
verde y la puerta de entrada era mi silla electrica. 


Después de ese mes quede solo, desesperadamente solo, caminaba y veía caras muertas,
todo era un absoluto cuadro dantesco. 


Quizá si no les hubieran aumentado los impuestos aún podrían costear, seguramente la caída
en el consumo tuvo algo que ver… puede que me echaran para cortar el déficit y no tener que
despedir más gente, que mi despido haya sido el costo en una estrategia para salvar la empresa


Pero que tarado, si mi jefe maneja un lamborghini y se va a un pais exotico cada vez que
puede, mientras que a mi no me pagaban ni la mitad de un sueldo mínimo. 


Si con mi sueldo no pagaban ni la propina de los lugares a donde iban a comer.


Las empresas son como los gobiernos, siempre ajustan para abajo, nunca un presidente o
un empresario van a resignar ni el lujo más ínfimo por rescatar la vida de un empleado. 


No estamos en la calle porque haya una crisis, estamos así porque sus lujos son cada vez
más caros y requieren recortar cada vez más puestos para mantener su estatus social. 


Me doy cuenta que soy un pelotudo, porque yo creía que trabajando duro todos los dias
podias ir creciendo y mejorando, ganando al menos lo mismo cada mes para vivir dignamente,
pero mientras el presidente aumenta la inflación tus jefes mejoran su nivel de vida a costa de
tu salario.


Tu laburo los hace ricos, pero para ellos siempre vas a ser un costo, un número,un dígito,
una pared que hay que tirar abajo para expandir su salón de juegos.


Al final de cuentas yo nunca me calle, para mi las personas son personas y siempre defendí
a mis compañeros, me quejaba cuando había que trabajar doce horas en vez de ocho,
ocupaba dos puestos cuando alguno se enfermaba y siempre me paraba en frente cuando
le gritaban a un compañero 


Pero lo único que obtuve fue su indiferencia cuando me echaron, y pesé cómo pueden
mis compañeros odiar a quien los defendio y amar a quien los castiga, los humilla y maltrata…
despues me acorde que Mauricio Macri ganó las elecciones y ya entendi todo, somos un
pais de mierda. 


Ayer pasé por la puerta, de aquel lugar donde solia trabajar, pensaba en entrar y gritarles
a todos, decirles lo que realmente pienso y lo que realmente son, tambien pensé pintar
todo el frente con aerosol, grafitiar datos de cada derecho laboral que violaban, pero
¿para qué?, todos los ministerios están comprados. 


Mire fijamente aquella puerta que atravece hace 5 años, cerré mis ojos y susurre al
marcharme “Adios para siempre”.


Tercer Corte






Guión:
Hacía frío, pero no era un día fresco en particular, llegué corriendo a tomarme el bondi que me deja justo en la puerta.

Ni bien pasé la puerta el de seguridad me dijo que pase directo a recursos humanos, pensé: ¿posta estos ratas me van a dar un aumento? Pero cuando entré, la cara del chabón me decía todo… cagué fuego .

¿Quién carajo se creen que son? Una manga de pelotudos que no saben cómo dirigir una empresa, si mi jefe se la pasaba levantando cuarentonas en Facebook. Me hicieron laburar un mes, el mes de preaviso le dicen, yo le digo seguir viniendo a laburar con los inútiles de siempre sabiendo que de todas maneras te van a echar al carajo. 

A veces nos hacían laburar 12 o 14 horas sin pagarnos nada, al principio zafaba, de última era desvelarse con los pibes, fumarse algo y putear a los jefes, pero después de 5 años en la misma situación entendí por qué los empleados mas antiguos eran los mas depresivos ¿Cómo no deprimirse con esa muela encarnada que no te podes sacar porque no te alcanza y no tenés obra social?

Todo un mes viviendo esta falta de derechos, desvelarse por la empresa, fumarse la cara de orto de estos hijos de puta una y otra vez sabiendo que debería estar buscando laburo en vez de estar acá. ¿Porque no echaron al que falta siempre porque supuestamente su hija vive enferma? ¿O al viejo ese que labura acá desde la epoca de Perón que vive diciendo que vuelvan las botas y así espanta a los clientes? ¿Porque me despidieron particularmente a mí si nunca laburé mal?…

Ya sé por qué me echaron. Por tener huevos, por reclamar ganar al menos el salario mínimo, por pedir que nos compencen las horas extra.

Pero es así, soy un pelotudo, porque siempre salté por todos para que después me digan el sindicalista, si ni sindicato había en ese aujero negro, ni delegado, ni derechos, ni sindicato ni una mierda. Yo no era un sindicalista, simplemente porque me interesaban mis compañeros, el bienestar propio y el del compañero laburante, en cambio a un sindicalista todo le chupa un huevo. ¿Vos te pensás que van a perder su super sueldo y sus beneficios políticos para defender a un pichón como vos?... Yo creía en el sindicalismo y los derechos, las luchas laborales, las conquistas, pero están todos más que comprados, y esto no es una frase hecha, es experiencia propia.

Ver cómo el sindicato botoneó a un compañero cuando fue a la sede a denunciar trabajo en negro, le pidieron el nombre y se lo mandaron a su jefe, increíble. 


¿Voy a cambiar? Ni en pedo, siempre voy a defender lo que es justo, aunque sepa que el precio es la indiferencia. Pero este fue mi precio, prenderme fuego por tener los huevos para defender mis derechos, aunque al final no haya conquistado nada. 


Segundo Corte






Primer Corte


GUION:
Me hicieron trabajar un mes, mi último mes. El mes del “preaviso” le dice la ley, un mes, donde cada dia volves a la oficina a reencontrarte con tus compañeros, que ya no son tus compañeros, para seguir enriqueciendo a tu nefasto jefe, que ya no es tu jefe.


Pero sin embargo, todavía era su empleado.
Pensé: “¿Con qué cara me echaste? si sigo trabajando para vos, un mes entero sigo trabajando para vos… ¿Que tan importante es mi presentismo, si a partir del mes que viene ya no será necesario? ¿Porque te importa tanto a que hora llegue? si al final en la empresa, solo estaba ocupando un puesto que no era mío, pero ya no podía hacer nada.


¿Que soy a fin de cuentas? ¿Una herramienta que sirvió en su momento, para enriquecer a la empresa y ahora ya no sirvo más? ¿Soy la ilusión de un puesto mejor? ¿Porque me dejaron recorrer dos años la empresa, si al final, no me iban a necesitar para nada en ningun lugar?


Solo puedo pensar en esos momentos macabros, donde tus compañeros te desconocen, donde tu jefe te hace sentir como un idiota, y más allá de todo. Lo único que puedo dilucidar, es aquella oficina, con el gerente de recursos humanos diciéndome:
“vamos a prescindir de tus servicios”.

Primer Consigna: Audio de 2 Minutos aproximadamente

https://soundcloud.com/franco-reinhardt/pav-2-tp4-audio-preliminar-primer-borrador-de-la-idea/s-k1st7

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